Dime que me dijiste que te dijera Que, si en algún momento bajaba los brazos Que el éxito en esta vida está en no rendirse Nunca jamás Dime que me pediste que te enseñara Cómo soy capaz de superarme después De haberlo intentado todo Viendo en cada dificultad una oportunidad Dime que serás capaz de levantarme si caigo Tropiezo, o resbalo de nuevo Dime que serás capaz de sorprenderme En mis días oscuros y malos momentos Dime que encontraremos la llave que abre La puerta a una nueva ilusión Dime que cerraremos la puerta Dándole de bruces a la frustración Que perder una batalla No es una guerra perdida Que jamás te rindas y dejes de luchar En tus manos un destino Y en tu mente un aliado Sólos en el camino Mi motivación y yo Dime que no pararemos hasta que el tiempo Y la perseverancia nos den la razón Ese fruto al que tantas veces llamamos “suerte” Sin darle valor Dime que serás mi compañero en este de viaje De buenos y mejores momentos Esos que aún están por llegar Esos que aún están por escribir y contar Dime que fuimos, somos, seremos La pieza del puzzle perfecto donde no encaja El fracaso, donde sólo hay sitio Para volver a intentarlo de nuevo Dime que iremos al filo de lo posible Plantándole cara a lo imposible Que pueda llegar a ser Por muy lejos, que, ni de cerca, lo podamos ver Que perder una batalla No es una guerra perdida Que jamás te rindas y dejes de luchar En tus manos un destino Y en tu mente un aliado Sólos en el camino Mi motivación y yo Que perder una batalla No es una guerra perdida Que jamás te rindas y dejes de luchar Solo quedará un camino Que nos lleve a no rendirnos Solos mi motivación y yo