Se despertó aun velado, cuando un haz de dolor cruzó su reino opaco y recordó su identidad después de haber llegado hasta la saciedad como siempre volverá el huesped de la noche a su juego de azar viviendo así libre de normas rompiendo las barreras de un mundo letal y explorará todos los rincones donde la democracia huela a libertad dominará a su voluntad la vigilia y agobios que se puedan presentar. El alba no será obstaculo en la larga caminata de aventura sin par sumergido sin remedio en el círulo vicioso de la sin razón nuestra amistad perdurará siempre que tu interior rechaze la violencia.