Recurrí a dónde escuché la fe A dónde no hay más allá No hay dolor Confíe en todo lo que destruía Lo que controla el tiempo El roce de su piel formaba parte de un mundo desconocido Que ya los hombres no conocen Pasé muchas noches Cambiando de forma ya que no encontraba alivio en la satisfacción, imperfecta e inquieta Insatisfecho cada noche cambiando de forma Me volví cambia pieles cada noche y al amanecer Yo fui un hombre en su sentir En su piel también Pues en su piel fui mujer, fui animal, fui planta, fui un Dios