(Chamarrita) Mi pecho tiene un rincón con caminos infranqueables y caminos que no son. Y en esa cruz de caminos sólo acierta el peregrino que apuesta su corazón. Mi pecho tiene también un agujero en el techo por donde se puede ver. A veces se ve llover o alguna nube que pasa y al lucero amanecer. Mi pecho tiene un portal sin cerrojo y sin candado y una ventana hacia el mar. Mi pecho es un bucanero tripulante de un velero sin nombre y sin bautizar. Mi pecho es un surco abierto, y es un volcán en reposo y un patio con un parral. Mi pecho tiene un rincón donde todos mis hermanos beberán del mismo vino, comerán del mismo pan.