Evoco en la distancia tu luz de atardeceres El mágico silencio que tanto idolatré La sombra de tus calles vistiendo mis amores Allí junto a la amada que nunca olvidaré Yo no sé si aún estará esa esquina de mi barrio Donde antaño yo aguardara a la reina de mi amor Bella estampa del recuerdo perfumada de jazmines Y encendida por el beso que al marchar le daba el sol Las nubes de ese cielo tal vez ya se han marchado Cansadas de no hallarnos muy juntos como ayer Y acaso si la brisa las trae aquí en mi cielo Le cuenten que no ha muerto en tu alma ese querer Te imagino en la distancia aguardando mi llegada Y en tu negra caballera una flor de reseda Bellas tardes asuncenas, yo presiento que han de oírme Y en un cofre de silencio a mi novia guardaré