Era la bruma que envolvía El espiral de mis sueños El breve roce de tu pelo Se esfumaba en el viento La caída de tus pestañas Me confundía amanecido La niebla tenaz Te envuelve y te lleva La claridad del día Te disipa y te pierde En la mañana, qué lindo Mirando postales del sahara Sincronizar nuestras miradas Y perdernos en el desierto Una caravana de mil camellos Se detiene y construye un templo El lagarto se aleja En su viaje secreto Las dunas lo vieron Despidiéndose a su espejo Ella de tarde en mi playa Sus manos con arena juegan Vestida de arcoíris Su pelo noche flameante El náufrago dobló la costa La gitana se sonríe Amó a su Dios Le concede la gracia El destino milagro Atardeciendo se diluvia