Dijo una vez un sabio Alégrate, joven, en tu juventud Y tome placer tu corazón en los días de tu adolescencia Anda en los caminos de tu corazón y en la vista de tus ojos Pero sabe que sobre todas estas cosas ve a buscar a Dios Así que deja la amargura, y los enojos, y la maldad Que la adolescencia y la juventud es para disfrutar Como me encanta sentirme vivo La incertidumbre de buscarme mis caminos Nada me falta, todo lo tengo Entre maletas vengo y entre maletas sigo Me encanta la incertidumbre, me lleva por cualquier camino Es que arriba hay uno que me guía Y aunque sea de noche, yo veo de día No hay valle que no se alumbre Montaña que a mí me estorbe Es que arriba hay uno que me guía Y aunque sea de noche, yo veo de día Incertidumbre, ay-ay-ay Incertidumbre, ay-ay-ay Si yo vengo de allá y ahora estoy acá No digo que no duela, sino que hay que aguantar, para avanzar He vivido en abundancia, también necesidad Y aunque no haya tendedero para la ropa yo secar, me da igual Ay, cómo me encanta sentirme vivo La incertidumbre de buscarme mis caminos Nada me falta, todo lo tengo Entre maletas vengo y entre maletas sigo Me encanta la incertidumbre, me lleva por cualquier camino Es que arriba hay uno que me guía Y aunque sea de noche, yo veo de día No hay valle que no se alumbre Montaña que a mí me estorbe Es que arriba hay uno que me guía Y aunque sea de noche, yo veo de día Me encanta la incertidumbre, me lleva por cualquier camino Es que arriba hay uno que me guía Y aunque sea de noche, yo veo de día No hay valle que no se alumbre Montaña que a mí me estorbe Es que arriba hay uno que me guía Y aunque sea de noche, yo veo de día Muchos somos los que nos vamos Y muchos son los que se quedan Pero el dolor y las lágrimas nunca nos dejan Pero cuando tenés a Dios de tu lado Ninguna montaña es muy alta Ningún valle tan profundo El camino se hace fácil y la lluvia es más ligera Y es ahí cuando la incertidumbre se convierte en vida