Venerable rosa mística, dulce madre llena de amor Atiende nuestras plegarias, eres paz en el clamor Fontanelli tu morada camino al cielo sin fin Tus escarchas nos iluminas como un nuevo jardín Son tus rosas esperanza, que en el alma hacen brotar Noche y día te cantamos, rosa mística sin par Tus lágrimas son consuelo, tu fragancia es oración En tus manos la ternura y en tus ojos redención, oh divina rosa pura Guía siempre nuestro andar Eres faro en la penumbra luz que nunca va a faltar De los sacerdotes guía, la pureza de tu amor La salud de los enfermos, reina y madre de todos Oh María rosa mística, llévanos contigo al cielo A Jesús eucaristía donde tú estás