Cuando miro los cielos y la tierra Y contemplo el paisaje de la mar Por las noches observo las estrellas En la mañana, de las aves oigo el trinar Cuando miro el Sol que asoma en las colinas Y me admiro de lo que mi Dios creó Es que tengo que decir desde mi alma Como mi Dios, no hay Dios como mi Dios Y es que tengo que decir desde mi alma Como mi Dios, no hay Dios como mi Dios Cuando Elías enfrentó a los profetas Ellos pedían fuego a Baal Herían sus cuerpos hasta sangrar Más no veían a su Dios fuego enviar Más Elías muy sereno miró hacia los cielos Y con confianza fuego a mi Dios pidió Rápidamente de los cielos bajó el fuego Como mi Dios, no hay Dios como mi Dios Es que tengo que decir desde mi alma Como mi Dios, no hay Dios como mi Dios