Llegando alegre a su ranchito Del cañador Dijo el gauchito No hay nada como la alegría De verte a vos, paloma mía A los rayitos del poniente Con emoción Con emoción, se abrazaron Y en un ansiado beso ardiente Su dulce amor Su dulce amor, saborearon Y mientras el largaba el pingo A su china fiel, así le habló