En Santa Amalia vivía una joven Linda y hermosa cómo un jazmín Ella solita se mantenía cosiendo ropa para vivir El mal hermano le dice un día Ay, hermanita del corazón Ya tu hermosura me tiene loco, y tú marido quiero ser yo La pobre joven quedó asombrada Y en el instante le respondió Mejor prefiero morir mil veces, antes que logres manchar mi honor Ay, ay, ay ajaja El mal hermano sacó el revólver y en el instante le disparó Dándole un tiro en los sentidos que todo el cráneo le destrozó Por ahí preguntan quién había sido luego preguntan la autoridad Vinieron gentes de todas partes a ver el crimen de aquel lugar Ah, chispas El juez declara que él había sido Yo soy el hombre que la maté Vete hermanita, vete tú al cielo que yo en la cárcel lo pagaré