Se levantan a las nubes Los aviones Remontandose En sublimes redacteros Jamás el miedo han conocido Los varones Ni se detiene a un derrumbe El orbentero Con su celo y sed de triunfo Los motores Por él cielo van dejando La memoria De los intrépidos aviadores De los señores Del indómito valor Esta noche De bulla y de verbena Te recuerden Tu dulce aterrizaje Ardiendo estoy Con tu coraje Rendido estoy A tu alma buena Mientras sigue La farra y la milonga Arrimado a tú pecho Yo me siento Capaz de desafiar al viento Prendido al brazo De la guía de mí amor