Muñeca vestida de percal Muñeca con alma de cristal Yo te lloré como a un niño Cuando te fuiste De mi arrabal ¿Y no eras feliz, acaso vos? Jamás te faltó cariño Que gozo saber Que habrás de volver Por vos me lo dice Dios Sos un bibelot Muriéndose de esplín Con cara de pierrot Con alma de violín Yo pienso desde acá Que no serás feliz Que pronto acabará Tu sueño allá en París Porque tu corazón Romántico, fatal Si escucha el bandoneón Su canto de arrabal Te ahoga la emoción No puedes más Sin quererlo, sollozas