Hay una mujer girando en la mesa Con unas alas blancas pintadas para vestirse está noche Y sin permiso de los listos Y con respeto pa los lentos Me acerco con mucho cuidado y encaró de frente Puedes parecer que apenas le importa Las palabras que rebotan en su boca antes de morir a sus pies Y puede que no esté cuando llegue la aurora Que me marche con ella y me vista está noche