El valle no es mi final Es el lugar donde aprendo a confiar Allí no hay tronos ni coronas Solo Tu voz y mi fe que aflora Las montañas me hacen cantar Pero en el valle aprendo a orar Y aunque no vea la salida Tu presencia me da vida Tu vara y Tu cayado me sostienen En sombras o luz, Tú permaneces Fe en el valle, fe en el dolor Fe que florece en medio del temor Mi confianza no depende del Sol Depende del Dios que es mi pastor En el valle hay gloria escondida Y mi alma se aferra a la vida Fe en el valle, es fe verdadera