Una vez un ruiseñor Con las claras de la aurora Quedó preso de una flor Lejos de su ruiseñora Esperando su vuelta en el nido Ella vio que la tarde moría Y a la noche cantándole al río Medio loca de amor le decía ¿Dónde estará mi vida? ¿Por qué no viene? ¿Qué rosita encendida me lo entretiene? Agua clara que caminas Entre juncos y mimbrales Dile que tienen espinas Las rosas de los rosales Dile que no hay colores que yo no tenga Que me muero de amores ¡Dile que venga!