México lindo y querido, señores Cuna de historias tan tristes Donde hay mujeres tan bravas Y en esta historia lo dice Rosa y Juanita quedaron huérfanas de padre y madre Vivían solas sin parientes, no contaban con hermanos Juanita era la más chica, cumpliría sus quince años Juanita bajó hasta el pueblo, para probar su vestido Pero estaba tan preciosa, se le antojó a Zeferino Y cuando ya regresaba, la mancilló el mal nacido Juanita volvió a su casa, llorando, con sus ropas destrozadas Y entre sollozos decía, "¡Ay, qué vergüenza mi hermana" Nadie supo su desgracia, y el tiempo siguió su marcha Rosa y Juanita planeaban cómo sería su venganza Y Zeferino en el pueblo, muy tranquilo se paseaba Llegó la fecha esperada, y hay un difunto en el pueblo Y dice quien lo encontró, que el cuerpo estaba incompleto Lo que le faltaba de hombre, se lo tragaban los perros Rosa y Juanita en el templo, quince años está cumpliendo