El viento suena a lamento Por los pagos de el Zanjón Pues se cuenta que un paisano Puestero de La Armonía Es séptimo hijo varón Ojeroso, clinas largas Hasta solo suele hablar Y no hay payé que le dentre De las viejas del lugar Cuando se oye aullar los perros Ni bien cierra la oración Hay temor en los paisanos De los pagos de el Zanjón Pues se cree que el puestero Se convierte en lobizón