El viejo destino, el tiempo y la muerte Tatuados en la piel, de una poesía Recorro el infinito, en un beso de tus labios Bebo la sabía de los corazones, regreso por un mar vacío No estoy aquí, navego por los cielos No estoy aquí, navego por los cielos Silencio de la noche, tú que guardas los secretos Respira en tu alma con tu infinito aliento Deshace mi pasado en sueño de las aves Noche oscura, palpito de estrellas Bautízame tu hijo, tú serás yo, yo seré tú Como en los viejos tiempos