Ah, si pudiésemos contar, las vueltas que da la vida, para que se pueda encontrar un gran amor Es como, si pudiésemos contar, las estrellas en el cielo, los granos de arena de ese mar, aun así Pobre el corazón de los apasionados, cruzan el desierto en busca de un oasis en flor, arriesgando todo por solo un miraje, pues van hacia una fuente oculta en las arenas Bienaventurados, los que de ellas beben, porque para siempre serán consolados Tan solo por amor, ponemos nuestras manos, al fuego de la pasión, dejándonos quemar, tan solo por amor Movemos tierra y cielo, rasgando siete velos, saltamos al abismo sin mirar atrás, tan solo por amor ¡La vida se rehace! Tan solo por amor, ponemos nuestras manos Al fuego de la pasión, dejándonos quemar, tan solo por amor La vida se rehace, la muerte ya no importa más