Eres fiel, cuando nadie me ayudó viniste a mi Cuando otros dijeron no, dijiste si Tu mano me ha levantado Aunque esté rodeado de muchos gigantes No retrocederé La victoria en ti encontraré Al alto, al cordero, al sublime, sea el honor Aunque pase por valle de sombra y de muerte No temeré, buscaré tu rostro de día y de noche, en ti confiaré De la muerte me has librado Tu sangre has derramado, sano soy en ti