Mirando a izquierda y a derecha en el cruce En una duda al elegir el camino A un segundo de chocarme de bruces contra mi destino Que no soy yo quien te buscaba de noche Que no eras tú quien me encontraba de día Y todo se rompió por aquel reproche cuando más te quería Y en la ventana miro hacia tu mañana y me pillo los dedos Y me paseo buscando tu mirada por el mundo entero Y si me caigo desde el cielo hasta el suelo Soñando que algún día volverás Eso no importa ya, que más me da Que más me da si me cierras la puerta Y te descubro como a aquel iceberg desde mi cubierta Que más me da si ya no estás conmigo Si ya no puedo llegar a sentir el calor de tu abrigo Y te pienso y me voy por las ramas Y me confundo ante mi desconcierto Que aún te veo bailar en mi cama cuando estoy despierto Yo te llamo y tú te quedas callada Y aún te canto a la vuelta de la esquina Que casi no me reconozco la voz por tanta nicotina Lanzar una interrogación y esperar con los brazos abiertos Y recibir tu signo de exclamación a pecho descubierto Y si me caigo desde el cielo hasta el suelo Soñando que algún día volverás Eso no importa ya, que más me da Que más me da si me cierras la puerta Y te descubro como a aquel iceberg desde mi cubierta Que más me da si ya no estás conmigo Si ya no puedo llegar a sentir el calor de tu abrigo Mirando a izquierda y a derecha en el cruce En una duda al elegir el camino Y todo se rompió por aquel reproche Que más me da si me cierras la puerta Y te descubro como a aquel iceberg desde mi cubierta Que más me da si ya no estás conmigo Si ya no puedo llegar a sentir el calor de tu abrigo