Yo sé que tus caricias Para siempre ya he perdido Pero nunca he podido Explicar tu indiferencia ¿Será que mi consciencia Se me ha enloquecido? ¿O jamás he merecido Disfrutar de tu presencia? La daga del desprecio Clavaste en mi vida Dejando una herida En mi débil corazón Y si muero de aflicción Serás la maldecida La malvada conocida De toda la creación El fuego de tus besos Mis labios ha quemado Y en mi pecho han quedado Las llamas de tu amor Y esas llamas con ardor Mi alma va secando Y mis penas suspirando Se me alivian en dolor Mas triste y solitario Seguiré con mi destino Como un pobre peregrino Mendigando por amor Y con lírico clamor De mi crucial sentimiento Cual calvario de tormento Llevo a cuestas mi dolor Cual calvario de tormento Llevo a cuestas mi dolor