La tarde se marchaba y entre sombras comenzó a llover Un corazón oraba ante Dios un poco más que ayer Señor, yo sé que me amas y tú sabes que te he sido fiel, no tardes en responder Pero en Dios hay que esperar su tiempo en lo que quieres ver El tiempo apresuraba a un reloj que cuelga en la pared Tal vez su fe menguada, convicción de lo que no se ve Pero a su Dios clamaba para con su amor y su poder su petición conceder Pero en Dios hay que esperar su tiempo en lo que quieres ver Doblaba sus rodillas ante Dios todas las madrugadas Y de sus ojos brotaba la pena mojando la almohada Porque en la Biblia había leído ya de que Dios contestaba Pedid y se os dará Siguió creyendo tener algún día aquellas cosas que tanto deseaba Porque es que en sus promesas, si confías, no te fallará Porque Dios concedió lo que pedía aun cuando menos ella lo esperaba Y comprendió que Dios obra en su tiempo y a su voluntad Doblaba sus rodillas ante Dios todas las madrugadas Y de sus ojos brotaba la pena mojando la almohada Porque en la Biblia había leído ya de que Dios contestaba Pedid y se os dará Si tú creyendo tener algún día aquellas cosas que tanto anhelaban Porque es que en sus promesas Si confías, Dios no te fallará