Murió mi compañera idolatrada La mujer que jamás olvidaré Y que llevo en el alma reflejada Como tiene en su pelo la alborada La estrella del callado amanecer Y en la noche callada y misteriosa Su recuerdo me invade el corazón Y su nombre dulcisimo Reboza de mis labios Temblando de emoción Ella fue la esperanza de mi vida Mi consuelo mi dicha y mi sentir La adorada mujer que no se olvida Que se lleva en el alma Hasta morir