En la vida conocí mujer igual a la flaca Por el negro de La Habana, tremendísima mulata En libras de piel y huesos, 40 kilos de salsa Y en la cara dos soles que sin palabras hablan Que sin palabras hablan La flaca duerme de día, dice que así el hambre engaña Y cuando cae la noche, baja a jugar a la tasca Y bailar y bailar, y tomar y tomar Una cerveza tras otra, pero ella nunca engorda, oh, oh Ella nunca engorda Por un beso de la flaca yo daría lo que fuera Por un beso de ella, aunque solo uno fuera Por un beso de la flaca yo daría lo que fuera Por un beso de ella Aunque solo uno fuera, aunque solo uno fuera Mojé mis sábanas blancas como dice la canción Recordando las caricias que me brindó el primer día Y enloquezco de ganas de dormir a su ladito Porque, Dios, que esta flaca a mí me tiene loquito, oh ho ho A mí me tiene loquito Por un beso de la flaca yo daría lo que fuera Por un beso de ella, aunque solo uno fuera Por un beso de la flaca yo daría lo que fuera Por un beso de ella Aunque solo uno fuera, aunque solo uno fuera ¡Qué lío! ¡Ay, ombe! Por un beso de la flaca yo daría lo que fuera Por un beso de ella, aunque solo uno fuera Por un beso de la flaca yo daría lo que fuera Por un beso de ella Aunque solo uno fuera Aunque solo uno fuera Aunque solo uno fuera Aunque solo uno fuera Aunque solo uno fuera Aunque solo uno fuera ¡Qué flaca, compadre, qué flaca! ¡Qué mujer!