Eloy Gonzalo nació el 1 de diciembre De 1868, en lo más crudo del invierno En la ciudad de Madrid. Nada más Nacer, el pequeño fue dejado en la Inclusa de la calle Mesón de Paredes En el bullicioso barrio de Lavapiés Una institución benéfica en la que se Acogía a niños abandonados, huérfanos O con padres que no podían hacerse Cargo de ellos. Entre sus pobres ropas El recién nacido llevaba una nota en la Que podía leerse: Este niño nació a las Seis de la mañana. Está sin bautizar y Rogamos que le ponga por nombre Eloy Gonzalo García, hijo legítimo de Luisa García, soltera, natural de Peñafiel Abuelos maternos, Santiago y Vicenta Las monjas encargadas de esa institución De caridad encontraron a un ama de cría Llamada Braulia Miguel que cuidó del niño Hasta que este cumplió los once años Edad en la que los acogidos debían dejar El centro y tenían que buscarse la vida lo Mejor que podían Todo empezó el 1 de diciembre de 1868 En medio del crudo invierno madrileño Nada más nacer, Gonzalo fue abandonado En la inclusa, una institución benéfica en la Que se acogía a niños abandonados Huérfanos o con padres que no podían cuidarlos Gonzalo, al que se ha descrito como un Joven de pelo castaño, ojos azules y metro Setenta y cinco de estatura, trabajó como Peón de albañil, jornalero y aprendiz de Barbero, hasta que en 1889 se alistó en el Regimiento de Dragones de Lusitania Donde alcanzó el rango de cabo en tan Solo dos años. Pero pronto las cosas se Torcieron. Según algunos registros militares De la época, el joven fue sometido a un Consejo de guerra acusado de amenazar Con una pistola a un oficial superior al que Al parecer, descubrió en la cama con su Prometida. Gonzalo fue condenado a doce Años de prisión en Valladolid, pero apenas Cumplió dos meses. En agosto de 1895 Las Cortes Generales aprobaron una ley De amnistía para todos aquellos presos que Estuvieran dispuestos a luchar en la última Fase de la guerra de Cuba. Y Gonzalo estaba Más que dispuesto. Hizo una petición al Ministro de la Guerra en la que solicitaba Limpiar su honra, derramando la sangre Por la patria " . De este modo, se acogió a La nueva ley y, tras un lento proceso Burocrático, el 25 de noviembre de 1895 Embarcó en el puerto de La Coruña con Destino a La Habana