Siento por mis venas cómo corre el mineral Arrabio es mi sangre y la siento como tal Que fluya mi canción, fundiendo el corazón Forjando acero puro en el caudal de mi voz Que fluya mi canción, fundiendo el corazón Forjando acero puro en mi voz Los cerros y los valles con su verde me darán El color que mi canto necesita pa’ aflorar Los ríos me darán ese dulce sabor Del canto de sus aguas para que te cante a vos Los ríos me darán ese dulce sabor Del canto de sus aguas para vos Por eso, en Carahunco, en El Remate y Forestal El Cucho, La Escalera, Río Blanco y la ciudad Se estremece mi voz de acero y mineral Cuando digo tu nombre, mi querido Palpalá Se estremece mi voz de acero y mineral Al pronunciar tu nombre, Palpalá Por tus calles anduve siendo chango sin saber Que ahora, ya de grande, llegaría a comprender Que no es casualidad el ser de donde soy Y que, gracias al cielo, palpaleño soy, señor Que no es casualidad el ser de donde soy De ser un palpaleño, sí, señor Como hijo de tu vientre, yo te juro, Palpalá Te llevaré presente donde sea mi cantar Que nunca olvidaré que allí es donde nací Y, si Dios me lo permite, allí también quiero morir Que nunca olvidaré que allí es donde nací Y allí también yo me quiero morir Por eso, en Carahunco, en El Remate y Forestal El Cucho, La Escalera, Río Blanco y la ciudad Se estremece mi voz de acero y mineral Al pronunciar tu nombre, mi querido Palpalá Se estremece mi voz de acero y mineral Al pronunciar tu nombre, Palpalá