Delicioso el olor que se desprende Carnicería enfiestada en mi mente Locura, palabras incoherentes Escondiendo verdades hirientes Descansa el mal en mi pecho Me usa a mí como lecho Se nutre del dolor de las presas de mi entorno Practica cada mañana dibujándome un rostro Voces, voces que me imploran tanto No griten tanto Mataré lo santo Y no esperen tanto De un simple encanto Hasta tus cadenas yo me la aguanto Al abismo yo ya lo vi Su tortura ya la sentí Al abismo yo ya lo vi Su tortura ya la sentí Profundo ser, recita agonía En esta oscura noche, milito sinfonía Profundo ser, recita agonía Me usan esas voces conocidas Profundo ser, recita agonía Voces, voces que me imploran tanto No griten tanto Mataré lo santo Y no esperen tanto De un simple encanto Hasta tus cadenas yo me la aguanto Al abismo yo ya lo vi Su tortura ya la sentí Al abismo yo ya lo vi Su tortura ya la sentí Empecé a sospechar Que no me siento bien Empecé a cosechar Demonios que crié Tu voz es una hoz, es un corte muy veloz Corta, corta, mi muñeca sin pensar Tu voz es una hoz, es un corte muy veloz Mata, mata, al demonio disfrazado Tu voz es una hoz, es un corte muy veloz Corta, corta, mi muñeca sin pensar Tu voz es una hoz, es un corte muy veloz Mata, mata, al demonio disfrazado