En un pueblo humilde Que ayer visite Vi tanta pobreza Que triste quedé Pero en un ranchito A un niño escuché Con rostro sonriente Cantar muy feliz Yo tengo una casa muy lejos de aquí Con puertas de perlas y un mar de cristal Y cuando me vaya más allá del Sol Veré a Jesucristo en mi vive hoy Entonces allí me puse a llorar Más no de tristeza si no de emoción Y junto aquel niño yo pude cantar Pensando en el cielo la misma canción Yo tengo una casa muy lejos de aquí Con puertas de perlas y un mar de cristal Y cuando me vaya más allá del Sol Veré a Jesucristo en mi vive hoy