Se encienden las sirenas cuando te pintas los labios Se trepan a la antena los poetas de tu barrio Y pierden los alcohólicos la cuenta de los días que llevan sin tomarte El sábado es un juego que todavía no empieza Tu ropa está en el suelo y el mundo se tropieza Se tiran contra el paño verde tus apostadores fuertes que fundieron bielas Inunda tu perfume la mugre de la calle Y suben el volumen los locos de su raye Y prenden los ateos la vela del deseo de frente a tu estampita Y llora, y llora, y llora la mafia de la moda Patea la belleza la caja de Pandora Mirándote al espejo ya nada es tan complejo Y tiembla la corona Confunden la esperanza los muertos del pasado Se sube a la balanza el boxeador noqueado Y escriben los anónimos tu nombre con el dedo en el vapor de la mampara Tu música de fondo se burla de las listas Los dados son redondos, no hay más terraplanistas Y buscan los astrónomos mirando las estrellas ascendentes en tu signo Remiendan sus disfraces los héroes abatidos Y escupen hacia el cielo los ángeles caídos Y acaban los piratas pescados en tus redes enterneciendo al dealer Y llora, y llora, y llora la mafia de la moda Se cortan los aplausos para pedir la hora Y bajo tus zapatos la tierra no es de nadie La tierra no es de nadie Y llora, y llora, y llora la mafia de la moda Se vuelan como águilas los patos de las bodas Y matan por tus besos los libres y los presos Los lobos y las lobas Se prenden las sirenas cuando te pintas los labios