No quisiera morir antes de haber visto el mar bajo el Sol
No quisiera morir antes de haber oído la risa de los niños
No quisiera morir antes de haber olido el concreto mojado
No quisiera morir antes de haber tocado tu piel canela
No quisiera morir antes de haber tomado la piel de tu boca
No quisiera morir antes de haber oído la voz de tu sesos