¡Saber cómo leer partituras es indispensable para quienes desean avanzar en sus estudios musicales! Aunque pueda parecer complicado, la lectura de partituras es simplemente un proceso de alfabetización.

Es algo que requiere tiempo y dedicación, pero es fundamental dominar esta técnica. Por eso, ¡te enseñaremos a leer partituras de una manera más fácil! ¿Empezamos?

¿Cómo leer partituras? 9 pasos para principiantes

Como ya hemos dicho, aprender a leer partituras es un proceso de alfabetización.

Para leer y escribir con fluidez, necesitas saber interpretar los símbolos gráficos de este tipo de notación musical. ¡Acompáñanos!

1. Entiende qué es una partitura

La partitura es un sistema de notación musical que utiliza figuras gráficas para representar visualmente los elementos de la teoría musical.

Estas figuras indican varios aspectos del sonido y la ejecución, tales como:

• la altura y duración de las notas;
• dinámicas;
• técnicas de ejecución.

Esta información guía a los músicos sobre cómo debe interpretarse la composición.

Además, la partitura marca los momentos de pausa en la música, indicando dónde no se debe emitir ningún sonido. En resumen, documenta la melodía, la armonía y el ritmo de la pieza musical.

Al aprender a leer partituras, adquieres la habilidad de tocar una canción que nunca has escuchado antes.

Así, la partitura sirve para registrar una composición musical o el arreglo completo de uno o varios instrumentos.

2. Entiende qué es el pentagrama y cómo se insertan las notas

El pentagrama es el primer concepto que debes conocer para aprender a leer partituras.

Está formado por cinco líneas horizontales y paralelas donde se escriben las figuras gráficas de la notación musical.

Estas figuras son los diferentes elementos que aparecen en una partitura, entre ellos, las notas musicales.

Para entender cómo se insertan las notas en el pentagrama, es necesario conocer el concepto de claves.

3. Conoce las claves de Sol y Fa

La clave es el símbolo que define la posición de las notas musicales en el pentagrama y establece una nota clave como referencia para las demás. Las claves más comunes son las de Sol y Fa.

La clave de Fa generalmente se utiliza en instrumentos de sonoridad grave, como el bajo. Por otro lado, instrumentos más agudos como la guitarra acústica, eléctrica y la flauta tienen sus partituras escritas en clave de Sol.

A su vez, el piano usa ambas claves: la clave de Fa muestra las notas graves, que se tocan con la mano izquierda.

Mientras tanto, la clave de Sol se toca con la mano derecha, que se encarga de las notas medias y agudas, y generalmente de la melodía.

4. Aprende a colocar las notas

Al inicio del pentagrama, encontramos el símbolo de la clave, representado por la clave de Sol en el siguiente ejemplo:

Como vemos, esta clave indica que toda nota escrita en la segunda línea (de abajo hacia arriba) será un Sol. A medida que subimos en el pentagrama, avanzamos en las notas de la escala natural, de grave a agudo.

En el espacio entre la segunda y tercera línea, encontramos un La, la tercera línea corresponde a un Si, y el cuarto espacio a un Do, y así sucesivamente.

Cuando descendemos en el pentagrama a partir de la nota Sol, retrocedemos los grados en la escala natural, de agudo a grave.

El espacio entre la segunda y la primera línea contiene un Fa, y la primera línea representa un Mi.

Esta misma lógica se aplica a la clave de Fa, en la cual la nota Fa de referencia se encuentra en la cuarta línea, contando de abajo hacia arriba.

5. Entiende la armadura de clave

Con la clave, aparecen algunos accidentes musicales, llamados sostenidos o bemoles. Estos conforman la armadura de clave, que altera las notas siempre que aparecen en la partitura.

El sostenido tiene la función de elevar la nota un semitono, haciéndola más aguda, mientras que el bemol baja la nota un semitono, haciéndola más grave.

Debido a estas alteraciones, la armadura de clave es uno de los principales elementos para definir la tonalidad de la música.

Por ejemplo, la escala de La mayor está compuesta por las siguientes notas:

• La
• Si
• Do#
• Re
• Mi
• Fa#
• Sol#
• La

La armadura de clave de una pieza en La mayor contiene tres sostenidos: uno en Fa, otro en Do y, finalmente, en Sol.

Sin embargo, en algunos momentos, puede ser necesario tocar estas notas en su forma natural.

En ese caso, un símbolo llamado becuadro se coloca al lado de la nota para anular el sostenido previamente determinado por la armadura de clave.

6. Asimila pulso, tempo y ritmo

Continuando nuestra charla sobre cómo leer partituras, vamos a los elementos relacionados con el tempo de una pieza musical.

El pulso, o pulsación, es la división de la línea temporal de la música en latidos constantes e iguales. 

El tempo indica la velocidad del pulso y se especifica al inicio de la partitura, sobre el primer pentagrama.

Existen dos formas de indicar el tempo. La primera es mediante el uso de términos en italiano, como se muestra a continuación:

Tempos lentos

• Larghissimo
• Grave
• Lento
• Largo
• Larghetto
• Adagio
• Adagietto

Tempos moderados

• Andantino
• Marcia Moderato
• Andante
• Andante Moderato
• Moderato

Tempos rápidos

• Allegro Moderato
• Allegretto
• Allegro
• Vivace
• Vivacissimo
• Allegrissimo
• Presto
• Prestissimo

Otra manera de mostrar el tempo en la partitura es por la cantidad de BPM (pulsos por minuto) que una figura rítmica determinada debe marcar.

El último elemento relacionado con el tempo de una pieza musical es el ritmo, que determina cómo se distribuyen las notas y los silencios entre las pulsaciones.

Para entender esto, es fundamental conocer las figuras rítmicas.

7. Conoce las figuras rítmicas y sus correlaciones

Comprender las figuras rítmicas es clave para saber cómo leer partituras. Son símbolos que indican la duración de las notas musicales. Las principales incluyen:

• Redonda
• Blanca
• Negra
• Corchea
• Semicorchea
• Fusa
• Semifusa

La duración de cada figura rítmica está determinada por la fórmula del compás, un concepto que hablaremos en el siguiente punto.

En un compás de cuatro por cuatro (4/4), por ejemplo, la redonda tiene una duración de cuatro tiempos.

La blanca dura la mitad del tiempo de la redonda, mientras que la negra dura la mitad del tiempo de la blanca, y así sucesivamente.

Redonda:

Blanca:

Negra:

Corchea:

Semicorchea:

Fusa:

Semifusa:

8. Comprende qué son el tempo y el compás

Existen varios tipos de compás, cada uno con una cantidad específica de tempos (pulsos o latidos).

Por ejemplo, un compás de cuatro por cuatro tiene cuatro pulsos, mientras que un compás ternario tiene tres pulsos.

Cada compás está delimitado por una línea vertical en el pentagrama. Además, al inicio de la partitura, después de la clave, se presenta la fórmula del compás, generalmente en forma de fracción.

El número superior indica cuántos tiempos hay en cada compás, mientras que el número inferior muestra qué figura rítmica corresponde a un tiempo.

Esto especifica en cuántas partes debe dividirse una redonda para obtener una unidad de tiempo.

9. Entiende las figuras de silencio

Cada una de las figuras rítmicas tiene una figura de silencio correspondiente, que comparte el mismo nombre y duración.

Los silencios son importantes para la estructura rítmica de una pieza, ya que permiten intervalos que dan forma y continuidad a la canción.

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