Un día, el indito Juan Diego
Oyó un canto celestial
Y apareció una señora
Que lo quiso saludar
¿A dónde vas, Juan Dieguito?
Ganaste mi corazón
A Tlatelolco, a la misa
A darle gracias a Dios
Yo soy la Virgen, Juan Diego
Y algo te quiero encargar
Dile al obispo que quiero
Mi casa en el Tepeyac
Será un abrazo del Cielo
Para los que aman a Dios
Si tú lo pides, mi Reina
Ya voy corriendo, ya voy
Ándale, corre, Juan Diego
Que esto no puede esperar
El amor de Dios tiene prisa
Y a ti te quiso mandar
Tú le dirás a los hombres
Que ella es la madre de Dios
De ti depende, Juan Diego
En ti, la Virgen confió
Volvió Juan Diego al cerrito
No le creyeron, quiso comprobar
Lo de la señora morena
Y que se la vuelve a encontrar
No me creyeron, tú sabes
Que tienes todo mi amor
Tendrás tú que perdonarme
Y encontrar a alguien mejor
No tengas miedo, Juan Diego
Que vas de parte de mí
Te daré una recompensa
Ándale, vuelve a insistir
Ándale, corre, Juan Diego
Que esto no puede esperar
El amor de Dios tiene prisa
Y a ti te quiso mandar
Tú le dirás a los hombres
Que ella es la madre de Dios
De ti depende, Juan Diego
En ti, la Virgen confió
Pobre Juan Diego, al otro día
Se le complicó su cita con María
¿A dónde corres, Juan Diego?
¿Por qué te escondes de mí?
De la vergüenza y dolor
No supo ni que decir
Ay, ¡Dios te salve, mi Reina!
¿Cómo amaneciste? ¿Estás con salud?
Mira, yo tengo un problema
Mi tío se puede morir
Tenme tan tita paciencia
Mañana, vuelvo a venir
¿Qué te preocupa, Juan Diego?
Todo lo puedo arreglar
Yo soy la Reina del Cielo
Y también soy tu mamá
Ándale, corre, Juan Diego
Que esto no puede esperar
El amor de Dios tiene prisa
Y a ti te quiso mandar
Tú le dirás a los hombres
Que ella es la madre de Dios
De ti depende, Juan Diego
En ti, la Virgen confió
Tráeme unas flores del cerro
Las llevarás en tu ayate
Párate frente al obispo
Es sumamente importante
Señor Obispo, aquí está
La prueba que usted quería
Son flores del Tepeyac
Donde había puras espinas
Y le creyeron ahora
No fue ningún disparate
Soltó, Juan Diego, el ayate
Y se dibujó su Señora
Ay, te queremos, Juan Diego
Gracias a ti, ella ahí está
Esperando en su casita
Del cerro del Tepeyac
Ella es la Reina del Cielo
Madre del único Dios
Nos vino a dar un abrazo
Y le decimos mamá
Puedes decirme mamá