Encendiste el cigarrillo y volviste a decir una y otra vez lo mismo
Pero no te animas a cruzar la puerta
Porque allá afuera sabes que siempre está el abismo
Es recurrente tu manera de actuar
Pero yo no soy quién para poderte juzgar
Todos tenemos estrellas que jamás han de brillar
Empeñaría mis sueños a cambio de volver a verte sonreír
Y que los fantasmas tropiecen por las escaleras
Y se conviertan en estatuas que puedas combatir
Donde brillará el cielo que cubrió nuestro altar
Donde caerán las hojas que en tus pies crujirán
A veces parte de la vida se transita en soledad
Aunque siempre tengas una mano que apretar
Los miedos suelen sellar las hendijas por donde escapar
Si no vez la luz que te puede guiar
Si las lágrimas se acumulan y te ahogan por dentro
Si miras y el camino solo tiene oscuridad
Si tu voz entrecortada es lo único que escuchas
Entiendo que sientas que ya no hay nada más
El cigarrillo se consume como se consume tu brillo
Porque cuando un vidrio se empaña
No refleja ni observa
Pero, aunque no sepa como remolcarte a la orilla
Nadaré con vos en las profundidades de tus pesadillas
Y algo surgirá desde el abismo de tu soledad
Donde brillará el cielo que cubrió nuestro altar
Donde caerán las hojas que en tus pies crujirán
Las calles del barrio preguntan por vos
Y la abuelita de la esquina espera bajo el Sol
Hay personas que mantienes con tu llama
A pesar de la noche oscura que envolvió tu mirada
Apaga la luz y descansa
Siempre amanecerá mañana
Te susurraré para que camines, aunque no sepas hacia donde
Que, aunque sientas un frío profundo por dentro
La vida sigue sonriendo después que el Sol se esconde