En el blando lecho
Que tiende el silencio
Recuestan su grave
Cansancio las horas
Y duerme la noche
Mecida en el viento
Que pasa
Volcando su carga de aromas
A ratos, mezclado
Al rumor de la tropa
Que cruza añorando
Blanduras de sueño
La voz del camino
Se escucha muy honda
Latiendo en el grito
Que lanza el tropero
Huija, jo, jo
Casquear de congojos
Sonar de cencerros
Rumor de los cascos
Batiendo en el suelo
Con sordo sonido
Que engulle el silencio
Paisaje de estrellas
Olor de poleo
Y allá, donde corta
La noche el sendero
Las sombras confunden
La pampa y el cielo