Cuando me haya ido, y llegue el momento de cerrar mis ojos, mis ojos
Ninguna roca sea eregida. Lo que dejaré son solo cenizas
No alcen cuentos sobre mi cuando se reunan alrededor del fuego
Voy hacer uno mismo con la madre tierra y no a cenar en algún lugar del cielo

No tengo amo, no pacte ningún juramento
Los dioses me dan igual
Yo dirijo el caballo que elijo montar
Cuando la tormenta se acerca y llueve sangre desde el cielo

Una vida, apenas una huella en la corteza del árbol del tiempo, del tiempo
Una muerte, apenas una gota de sangre en la guadaña brillante de los segadores, de la guadaña brillante
No me llevare nada a dónde iré el día que yo muera, yo muera
Cuando mi estrella haya dejado de brillar, más en un agujero poco profundo voy a yacer, voy a yacer

Nadie murió por mis pecados
No hay fe atada a mi nombre
El camino que elijo caminar es mío
Cuando las nubes se tornen rojas y el horizonte este en llamas

Mi sangre, mi corazón, mi alma, mis manos, mis pies
Mi pelo y ojos, mi cabeza, mis labios y dientes
Mis brazos, mi pierna, mi pene, mi decisión y mi vida
Mis pulmones, mi lengua, hasta el día que yo muera