La bossa nova es un género muy reverenciado en todo el mundo, por sus armonías creativas y ritmos impresionantes. Si te gusta el estilo, ¡entonces te enseñaremos algunos clásicos de la bossa nova para tocar en la guitarra!

Vas a conocer los éxitos de uno de los más prestigiosos géneros brasileños que hicieron historia, además de consejos que facilitarán tu aprendizaje. ¡Adelante!

20 canciones de bossa nova para tocar en la guitarra

Nuestra selección cuenta tanto con los clásicos de la bossa nova fáciles de tocar, como con los más complejos. ¡La lista es para principiantes y expertos en la guitarra!

Garota de Ipanema — Tom Jobim y Vinicius de Moraes

Uno de los mayores clásicos de la bossa nova, Garota de Ipanema, está en la tonalidad de F y tiene 15 acordes. Sus formaciones tienen extensiones muy bonitas y no presentan cejilla.

Para tocar este éxito, usa el pulgar para los bajos mientras los dedos índice, medio y anular tocan las cuerdas primas.

Chega de Saudade — João Gilberto

Aunque la cantidad de acordes de Chega de Saudade pueda asustar a primera vista (39), el ritmo es prácticamente el mismo en toda la canción, lo que facilita bastante la ejecución.

Presta atención a las 6 cejillas que deben presionar las cuerdas de manera firme. También recomendamos dividir la canción en partes para practicarla por secciones antes de tocarla completa.

Eu Sei Que Vou Te Amar – Tom Jobim

La armonía de Eu Sei Que Vou Te Amar es muy interesante porque incluye acordes disminuidos, con séptima y undécima, por ejemplo.

A pesar de los nombres complicados, las digitaciones son simples y las cuerdas deben tocarse con fingerpicking.

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A Rã — João Donato

Con 14 acordes, A Rã  está en la tonalidad de C y algunos acordes requieren una mayor apertura de los dedos. Por su parte, el ritmo es muy animado y con swing, lo que la hace ideal para tocar con púa.

Onde Anda Você — Vinicius de Moraes y Toquinho

El mayor desafío de Onde Anda Você está en memorizar las progresiones, ya que solo 2 de los 17 acordes tienen cejilla.

Cabe recordar que la mano derecha — para los zurdos, la izquierda — debe estar bien suelta y mezclar el rasgueo con sutiles punteos.

Wave — Tom Jobim

Wave cuenta con una introducción bien marcada y, nuevamente, el ritmo se hace con los dedos.

Con respecto a la armonía de la canción, recomendamos tener un cuidado especial para no perderse con los acordes de paso.

Cuitelinho — Nara León

Con solo 4 acordes, siendo el E° el más diferente de ellos, Cuitelinho posee una digitación sencilla de ejecutar.

Toda la canción debe tocarse con un punteo estándar y con un ritmo constante.

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Canto de Ossanha — Baden Powell

Un ritmo interesante y frases creativas realzan los acordes del Canto de Ossanha. Sin embargo, es perfectamente posible tocarlo de una forma más sencilla, simplemente realizando un groove estándar con los dedos. Además, de los 11 acordes de la canción, solo 2 tienen cejillas.

Pela Luz dos Olhos Teus – Tom Jobim

A pesar de las muchas variaciones en su armonía, Pela Luz Dos Olhos Teus tiene un ritmo lento y puedes memorizar los acordes en tu cabeza para realizar correctamente los cambios.

O Pato — João Gilberto

Una excelente manera de aprender otras posibilidades armónicas, O Pato  presenta 11 acordes con variaciones de cuatro formaciones básicas: A, D, E y G.

El ritmo tiene pequeñas alternancias de ataque según las partes de la canción, por lo que recomendamos prestar cierta atención al ejecutarla.

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Influência do Jazz — Carlos Lyra

Aunque su ritmo no es uno de los más simples, Influência do Jazz es una canción corta, siendo una buena oportunidad para practicar algunas técnicas, como la de la mano derecha (izquierda, en el caso de los zurdos). Está en la tonalidad de G y ninguno de sus 20 acordes presenta cejilla.

Tarde em Itapoã — Vinicius de Moraes

Uno de los grandes clásicos de la bossa nova, Tarde em Itapoã presenta las principales características del género, como acordes muy bonitos y un ritmo agradable.

Para tocarla, recomendamos prestar especial atención a la forma del acorde de Gm7/F, que exige una amplia apertura de los dedos.

Água de Beber — Tom Jobim

Con 16 acordes y en la tonalidad de Bm, Água de Beber posee un ritmo animado con variaciones de dinámica. Esto significa que puedes soltar la muñeca y ser más flexible al tocar.

En contraste, busca replicar las pausas y anticipaciones para respetar al máximo el arreglo original.

Pra Dizer Adeus — Edu Lobo

En la tonalidad de Bb, Pra Dizer Adeus posee 19 acordes que se alejan de lo básico y tienen una sonoridad muy especial. Además, su ritmo es lento, lo que simplifica la formación de los acordes.

A Casa — Vinicius de Moraes

Una de las canciones más tranquilas de la bossa nova, A Casa puede ser tocada con solo tres acordes: A, D y E. La introducción presenta un tema melódico junto a la armonía y los acordes deben ser punteados en la mayor parte de la canción.

O Barquinho — Roberto Menescal

O Barquinho tiene algunos acordes con cejilla y otros bastante abiertos, como el A7/9b. Así que préstale especial atención a la digitación de los acordes para que todas las notas suenen naturales.

Samba da Bênção – Baden Powell y Vinicius de Moraes

En esta versión de Samba da Bênção, se utilizan solo tres acordes: Em7, A7 y D6/F#, y solo se necesitan dos dedos para formar cada uno de ellos. Además, el ritmo debe ser vivo y bien marcado.

Corcovado — João Gilberto

Para tocar Corcovado, debes intercalar las primas (cuerdas más agudas) con las bordonas (cuerdas más graves) de manera sutil, ya que no hay novedades en cuanto al ritmo.

Aunque hay algunos acordes más complejos en la canción, los cambios de uno a otro no son complicados.

Manhã de Carnaval — Nara Leão

Manhã de Carnaval posee un bello solo de guitarra en la introducción, que utiliza técnicas básicas, como ligados y slides. La armonía en G tiene soluciones interesantes para acompañar la melodía vocal.

Por su parte, el ritmo es fácil de identificar al escuchar la grabación, ya que se trata de una canción naturalmente más lenta.

Águas de Março — Tom Jobim

El mayor desafío de Águas de Março está en los cambios rápidos de acordes, lo que exige agilidad al tocar. Esto significa que debes tener en mente las 20 formas de los acordes antes de iniciar la interpretación, puesto que el ritmo debe ejecutarse con precisión y claridad en las notas.

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Traducido y adaptado por Amana Dias Colares.