Soy el mismo viajero que salió una mañana
Taciturno y sombrío un consuelo a buscar
Por estrechos senderos
Llegué a tierras lejanas

Donde solo hay abrojos
La crueldad inhumana
Donde reina el estío
La tristeza y el pesar

Hoy envuelto de nuevo y me parece que hacía años
Que deje mi cabaña y mi patrio vergel con mi espíritu en enfermo
De sufrir desengaños

De luchar con los genios
De países extraños
Que por ser me han brindado
Una copa de hiel

Traigo un pardo repleto de recuerdos y penas
De mi muerta alegría y de mis horas tan buenas
Que se fueron errantes con mi dicha de ayer

Y hoy tan solo me quedan
Enlutada mi senda
Ni la u en la mano y la triste leyenda dónde cuarto a la historia de una ingrata mujer

Pobrecito viajero que ha sufrido en la vida
Lo que nadie imagina, lo que nadie sufrió
En sus horas de pena
Su dolor le convida

Una copa de alcívar
De brebaje suicida
Sus momentos lo tienen
Como Cristo sufrió