Em
Hubiera podido ser
B7
Hermoso como un jacinto
E7
Con tus ojos y tu boca
Am
Y tu piel color de trigo
Pero con un corazón
Em
Grande y loco como el mío
Cm
Hubiera podido ir
Am B7
Las tardes de los domingos.
Em
De mi mano y de la tuya
B7
Con su traje de marino
E7
Luciendo un ancla en el brazo
Am
Y en la gorra un nombre antiguo
Hubiera salido a ti
Em
En lo dulce y en lo vivo
Cm
En lo abierto de la risa
Am B7
Y en lo claro del instinto.
D7
Y a mi tal vez que saliese
Gm
En lo triste y en lo lirico
Dm Am
Y en esa torpe manera
Am
De verlo todo distinto
Ay! que cuarto con juguetes
Em
Amor hubiera tenido
B7
Tres caballos, dos espadas
Em
Y un carro verde de pino
B7
Un tren con siete estaciones
Em
Un barco, un pájaro, un nido
B7
Y cien soldados de plomo
Em
De plata y oro vestidos.
II.
En tu cómoda de cedro
Nuestro ajuar se quedo frío
Entre azucena y manzanos
Entre romero y membrillo
Que pálidos los encajes
Que sin olor los pañuelos
Y que sin sangre el cariño
Tu te has casado con otro
Yo con otra he hecho lo mismo.
Juramentos y palabras
Están secos y marchitos
En un antiguo almanaque
Sin sábado ni domingos
Ahora bajas al paseo
Rodeada de tus hijos
Dando el brazo a la levita
que se pone tu marido.
Nos saludamos de lejos
Como dos desconocidos
Tu marido baja y sube
La chistera, yo me inclino
Pero yo no me hago cargo
De que hemos envejecido
Porque te sigo queriendo
Igual o mas que al principio.
Y te veo como entonces
Como tu criatura de lirio
Y aquella voz que decía
Cuando tengamos un hijo
Y en esas tardes de lluvia
Cuando mueves los bolillos
Y yo paso por la calle
Con mi pena y con mi libro
Dices con miedo entre sombras
Amparada en el visillo
Ay! si yo con ese hombre
Hubiese tenido un hijo.